En el desarrollo de cada uno de los proyectos hubo diversas circunstancias que implicaron hacer ajustes o cambios a lo largo de todo el proceso e incluso al final de cada obra, distintos factores como el presupuesto, la zona, las necesidades, los gustos, el proceso constructivo, los materiales, el diseño, los cambios repentinos y un sin fin de circunstancias, hicieron que algunos proyectos tuvieran pequeñas o grandes modificaciones, cada uno de ellos cumplió con las necesidades de cada persona que los habita y con el mejor resultado, su satisfacción y agradecimiento, siendo por lo tanto una contribución más a la arquitectura.